miércoles, 29 de octubre de 2014

San Andrés, Islas Vivas

Siempre quise regresar y hoy, después de nueve años, me sorprendo aún más con la gama de azules del mar que rodea la isla, con la suave brisa caribeña que te envuelve desde el mismo instante en que te bajas del avión y con la amabilidad de sus nativos y raizales.

San Andrés desde Johnny Cay

En el archipiélago, conformado por islas, cayos e islotes, habitan aproximadamente 80 mil pobladores entre gente del interior de Colombia, extranjeros, los nativos y la comunidad étnica raizal descendiente de los esclavos africanos, los colonos ingleses y holandeses. Aquí se habla perfectamente el inglés y el español más sin embargo, entre los raizales, hablan el inglés criollo o creole que está basado en el akán africano y cuya gramática está condicionada por el sonido.



Otro sonido es el de las música que rodea las islas como el Calypso, el reggae, la soca, el mentó, el góspel o el nuevo ritmo caribeño llamado modeup, todos ellos, son sinónimo de una  verdadera identidad cultural. Una experiencia de no perderse es asistir a una de las iglesias en día domingo y compartir los maravillosos coros góspel.

San Andrés, Providencia y Santa Catalina tienen mucho para ofrecerle al viajero y al turista convencional. Además de todos los lugares naturales como la piscinita, el hoyo soplador, la cueva de Morgan, el majestuoso jardín botánico, la laguna Big Pond ideal para el avistamiento de aves o sus playas que pueden conocer alquilando un carrito de golf (cuatro personas), los visitantes pueden ir al parque temático Pueblito Isleño con las 36 esculturas del maestro Mario Hoyos, montar a caballo,  conocer las diferentes iglesias, ir al Paradise Farm donde lo llevarán a conocer la tipología de los árboles o simplemente, irse de compras. Aquí es puerto libre y encontrarán electrodomésticos, tecnología y perfumes al alcance de cualquier bolsillo. Es importante saber que la gran mayoría del comercio cierra sus puertas a la hora del almuerzo.

Los raizales son muy amables

Para otros, San Andrés es ideal para bucear de día o de noche, la visibilidad es de aproximadamente 30 metros y la temperatura del agua de 26 C° en promedio, hacer snorkeling, pesca controlada, aprender windsurf, kitesurf o sunfish, remar en kayak, navegar hasta Cayo Bolívar (50 minutos) acompañado de delfines o irse a almorzar a Jhonny Cay, el acuario o Haynes Cay. Estos dos últimos, se pueden recorrer caminando por el mar ya que están separados por una corta distancia, eso sí, se debe hacer con zapatos para agua, ya que son cayos coralinos. Si quiere un goce completo, nade con las mantarayas o viaje en el semisumergible con fondo de cristal o sumérjase en el océano a bordo del submarino Nautilus. No olviden llevar las caretas o se perderán el verdadero paraíso submarino.

Trampolín en la piscina natural






En el 2014, las algas rojas llegaron a las playas después de 50 años
















Si lo que les gusta es comer, aquí no podrán dejar de deleitarse con la gastronomía tradicional isleña. Los ingredientes como el coco, el fruto del pan y la albahaca se combinan a la perfección con la langosta, el cangrejo o el pescado. No dejen de probar las recetas típicas como el Rondón  que por lo general se prepara al aire libre sobre leña o irse a los puestos informales de la playa donde le ofrecerán no sólo platos fuertes sino el pan tradicional o los patties (empanadas de cangrejo), el bami (arepas de harina de yuca), el dumpling (amasijos de harina de trigo, maíz o yuca), cocteles de camarón, el refrescante cocofresa o el tradicional coco loco. Comprando en estos puntos informales, se apoya a la economía de los raizales.

Bebidas para todos los gustos

Un lugar imperdible en esta visita a la isla, es ir a escuchar música o bailar al Bar de Kella en la playa de San Luis. Claro que hay bares, discotecas y restaurantes  internacionales para todos los gustos.

En la playa puede recibir la visita de amigables lagartos

Dónde dormir? Hay hoteles de todos los tamaños y precios. Desde los todo incluido, los cuales no son de mi gusto ya que me perdería el contacto directo con los nativos y sus costumbres,  hoteles medianos, apartamentos y cabañas hasta las maravillosas posadas nativas. Estas son una alternativa de alojamiento ideal para viajeros informales e ideales para el bolsillo. En ellas, es posible experimentar sus costumbres, cultura, música, dialecto y gastronomía. En sólo San Andrés encontrarán más de 80 posadas localizadas en diferentes sectores de la Isla.

Les comparto el video que realizamos para Proexport y el Fondo de Promoción Turística hace unos años que nos muestra todo lo bueno que nos ofrece el archipiélago.

Recomendaciones:
. No olviden comprar la tarjeta de turista cuyo valor es de $ 50.000 (US.16), guárdenla bien, si la pierden, deberán pagar de nuevo su valor a la salida.

. Eviten tocar, tomar o llevarse coral, plantas o animales. Consuman racionalmente el agua y hagan un adecuado manejo de las basuras. Ir a San Andrés es un privilegio, se está en una de las pocas reservas de biósfera que aún exísten por lo tanto, todos y cada uno de los viajeros y turistas debemos tener mayor responsabilidad al visitarla.

Lo mejor de viajar es compartir experiencias. Si les gustó la información, fue de utilidad o tienen preguntas, no olviden hacer sus comentarios. Los espero!!!!